lunes, 26 de noviembre de 2012

La canción que cantan, de bar en bar, los que beben para olvidar.


Pasan las horas, lo días, los meses, estamos en invierno otra vez, casi sin darnos cuenta. Seguimos con la misma rutina de siempre, nada ha cambiado, nosotros tampoco. Suena Sabina como melodía de fondo, grande Sabina, él sí sabe como calar hondo con sus palabras. Hoy es una noche melancólica, no triste del todo, pero noche para recordar viejos amigos, viejos amores. Luces en las calles vacías que guardan más historias que muchos libros. Luces que han visto y han sido testigos de muchos amores fugaces, de amores de una noche, de amores inconfesables.
todos nos ponemos un poco melancólicos de vez en cuando, y más cuando te acuestas por la noche, en una cama, aunque sea con compañía, pensando si tú también me recuerdas, si tú también recuerdas aquel día. 
Y mientras tanto… “amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño”, susurra la voz desgarrada de mi querido Sabina. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario